El local, de titularidad municipal, está situado en el flamenco barrio de Santa María y será inaugurado oficialmente el próximo 24 de septiembre.
Web Revista La Flamenca Luis M. Pérez. 2/9/2015 Fotos: Juan Lozano
Suena “La Atlántida” de Manuel de Falla en el reloj del Consistorio, plaza de San Juan de Dios, cuando ordenamos nuestros pasos por Sopranis, hacia el Compás de Santo Domingo, donde habita la Patrona, la del Rosario. Cuánta música, cuántas letras por alegrías se nos vienen encima, mira, allí La Merced, con la estatua de Chano Lobato, clavel en mano, quién se lo colocará calladamente cada mañana; por ahí se ve la calle Botica, la más flamenca del mundo, calle empinada y llenita de historias de artistas, de toreros, de carne de bragueta, la que salía sin permiso del matadero.
Nos recibe gentilmente, como siempre, don Antonio Barberán Reviriego, Presidente de la Cátedra desde agosto de 2011. A pesar de la premura con que se ha montado todo, el pequeño local se ha vestido de antiguo, y la historia del arte flamenco rezuma por sus paredes, con una impresionante colección de fotografías, muchas de ellas inéditas, carátulas de discos y cartelería original de artistas gaditanos. Antonio nos va explicando cada objeto con la ilusión con que un niño mostraría su colección de cromos, y la pasión del enorme aficionado que encierra su gran envergadura física y como persona.
“La Cátedra la creó Paco del Río como Cátedra itinerante en 1998 y, como él presidía también la asociación “Los Corrales”, que es una asociación potente aquí en Cádiz, pues nos reuníamos allí. Al morir Paco, surgió la necesidad de encontrar una sede propia, y en ello hemos estado trabajando. Gracias a la Asociación “Las Tres Torres”, que nos cedió este local municipal, y a la buena disposición del nuevo equipo de gobierno en el Ayuntamiento, tenemos ahora esta oficina para poder trabajar dignamente”.
La Cátedra de Flamencología de Cádiz, al igual que la de Jerez, no se encuentra dentro del ámbito universitario. Es una asociación y, como tal, tiene su nómina de socios, no sólo de número, sino también honorarios. Es una entidad de estudio, sin ánimo de lucro, cuyo objeto es “la difusión del flamenco gaditano, la conservación, el estudio y, por supuesto, la promoción de los flamencos de esta tierra”.
“La realidad es que partimos ahora prácticamente desde cero, lo cual nos llena de ilusión, y pretendemos implicar a todas las instituciones y a todos los amantes de este arte, porque tenemos cantidad de proyectos para trabajar. El próximo día 24 de septiembre queremos hacer la presentación en el Centro de Arte Flamenco “La Merced”, y contamos en principio con la colaboración de la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento, una institución que parece dispuesta, a diferencia de la Corporación anterior, a luchar por el flamenco de Cádiz.”
Entre los proyectos que hacen pila en la mesa de Antonio se encuentran un ciclo de tertulias que se llamará Cantaores gaditanos de la A a la Z, y las bases de un Concurso de los Cantes de Cádiz, con una esmerada clasificación de todos los estilos propios gaditanos, desde las cantiñas y los tientos hasta las tonás, seguiriyas y romances. Para llevar a cabo su labor, la Cátedra de Flamencología de Cádiz cuenta con una serie de recursos propios, como una colección de más de cincuenta mil registros sonoros, que Antonio Barberán ha puesto a su disposición, así como su blog de flamenco El callejón del duende, que aunque dedicado exclusivamente a artistas gaditanos, cuenta ya con más de 150.000 visitas.