El propietario del Tablao El Arenal tiene claro que recuperaremos la normalidad de siempre, pero sólo y cuando exista una medicación o vacuna que nos quite el miedo y nos aporte garantía y tranquilidad, “esa tranquilidad que este virus nos ha arrebatado”.
Revista La Flamenca. R. De la Villa. 8/5/2020
El Tablao es el templo del flamenco, el lugar que ha fraguado y donde se fraguan auténticos artistas del arte jondo, aquel sitio de raíz donde en sus orígenes, el purista, el aficionado, el consagrado… acudía en busca del flamenco sin aditivo, de la esencia, del duende, del arte y el compás sin límites.
Hoy, los Tablaos de todas España también están sufriendo las consecuencias de la crisis sanitaria y económica del covid19. Y en Revista La Flamenca hemos querido darle su espacio a través de un tablao mítico en Sevilla, El Arenal.
Al frente de él está su propietario Francisco Rodríguez Rodríguez. Empresario firme con sus ideas, con perspectivas muy clara y siempre pensando en el futuro de forma positiva aunque con cautela.
El Tablao El Arenal cuenta con 40 años de historia y es conocido por todo el mundo. Y cuando digo por todo el mundo, es así literal, por todo el mundo, pues hasta la famosa cabecera del New York Time escribió de él en su día dejando para la historia de este rincón cabal sevillano la afirmación de que “es el mejor lugar del mundo para sentir las emociones del Arte Flamenco”.
“HEMOS PASADO DE ESTAR EN ACTIVIDAD, A CERRAR Y PARAR EN SECO”
Un tablao que no pierde su esencia, la de su fundador el bailaor trianero, Curro Vélez, el del flamenco íntimo, puro y gitano. En nuestra conversación con Francisco, nos dice que su Tablao al igual que todos los de España y la mayoría de negocios del país se han visto abocados, de la noche a la mañana a cerrar, se trata de una crisis sanitaria que “nos está afectando al 100%. Hemos pasado de estar en actividad, a cerrar y parar en seco”. Esto está provocando que de un día a otro se deje de facturar. Sin embargo, los gastos corrientes siguen llegando y hay que continuar pagando a pesar de ello.
Francisco insiste, que aunque ha sido algo “drástico”, en El Arenal, en el mes de diciembre, algo se vislumbraba, pues tal y como nos ha afirmado “fue un mes bajo comparado con otros años”. Aunque sin duda alguna, la paralización total llegó cuando en España se desató el problema el 14 de marzo.
Cuando le preguntamos por pérdidas nos cometan, que él las traduce en todo lo que tiene que pagar, desde trabajadores, proveedores, impuestos… “Porque, aunque gracias a Dios se ha establecido el tema de los ERTE, hemos llegado a convenios con proveedores…, es un aplazamiento, por lo que más tarde o más temprano habrá que abonarlo”.
“EL TABLAO ES EL SEGURO DE UN ARTISTA”
En cuanto a la situación de los artistas, según su experiencia por la relación que mantiene con ellos, además de darles trabajo día tras día en su Tablao, Francisco asegura que hay algunos que se enfrentan a una situación insostenible. “El tablao es el seguro de un artista”, porque aunque hagan giras dentro y fuera del país, en el día a día necesitan un soporte para mantener el nivel de vida y eso, según Francisco, se lo puede aportar un Tablao.
Por eso nos insisten que ellos, presentan ahora un doble problema, “tablaos cerrados, giras anuladas, Festivales anulados… el artista lo está pasando bastante mal, muy mal”. Para seguir diciendo que a este colectivo “se le han cerrado todas las puertas que tenía abiertas, porque se le ha clausurado el mundo entero. No tienen actividad alguna y pienso que con malas perspectiva de momento”.
“VIVIR DEL TURISMO NO ES HACER UN ESPECTÁCULO PARA EL TURISMO”
Si algo nos ha quedado claro de Francisco es que es positivo porque cree y, casi me atrevería a decir que afirma con contundencia, que todo volverá a la normalidad. Pero es realista, muy realista, y dice que para alcanzar esa normalidad, la cual nos asegura que no será “nueva normalidad” sino que será la normalidad de siempre, hay mucho que andar, mucho que esperar, por lo que la paciencia es fundamental. “Esto se va a recuperar a largo plazo” Y hace esta afirmación porque insiste que España, Andalucía, Sevilla y el Flamenco de forma concreta, vive del turismo “en un 90%”.
Aquí nos hace un inciso para dejar claro a todo el mundo que “vivir del turismo no es hacer un espectáculo para el turismo”, “nosotros hacemos espectáculos de calidad”, pensando en este arte como bien inmaterial de la humanidad, porque sin duda alguna, un tablao es la plataforma de lanzamiento de la Marca de España fuera de nuestras fronteras.
Retomando el tema del futuro del Flamenco en general y de los Tablaos de forma específica, Francisco es insistente y tajante, “hasta que no exista una medicación o vacuna este problema no se va a arreglar del todo”. Piensa que esta es la única solución para atajar el miedo que está provocando el coronavirus: “El miedo es algo que al turista le tira mucho. La persona que va a viaja, indiscutiblemente, se lo va a pensar, y mucho. Hasta que no tengamos algo claro, y que genere confianza en el público para que pueda viajar con tranquilidad y garantía, lo vamos a tener muy complicado”.
“YO ME DARÍA CASI POR SATISFECHO, SI EN PRIMAVERA DEL AÑO QUE VIENE ESTAMOS MEDIO NAVEGANDO”
Es evidente que el flamenco sin turismo lo va a pasar mal, por ello, Francisco se reitera en la necesidad imperante del medicamento o la vacuna. “El miedo es muy difícil de quitar, y para ello, tiene que existir algo muy contundente y muy probado para recuperar la confianza”. Por lo que sus perspectivas se ponen en la próxima primavera, fecha en la que pone la vuelta a la normalidad, siempre y cuando se vayan haciendo las cosas poco a poco, con buen talante y de forma contundente. Como un buen cante, despacito y a compás. “Yo me daría casi por satisfecho, si en primavera del año que viene estamos medio navegando”.
“VOLVERÉ CON MI FORMA DE HACER FLAMENCO, DE CALIDAD”
En este filosofar o conversación casi psicológica de qué es el miedo y cómo acabar con él, se me escapa la propuesta de si es tiempo de reinventarse, si quizás es hora de prevalecer el streaming al flamenco en vivo y de tú a tú. Y ante esto, de forma clara y contundente su respuesta es “No. Cuando se vuelva hay que volver como antes”.
“Volveré con mi forma de hacer flamenco, de calidad”, aunque tenga que hacerlo de forma escalonada, incorporando a su casi treintena de trabajadores poco a poco, adaptándose a lo dictado en materia de sanidad y reestructurando su organigrama, pero igual que siempre, con flamenco sin aditivos, íntegro…
En cuanto al papel de las Administraciones públicas en toda esta crisis tiene dos cosas muy claras. Por un lado, entiende que desde el Ayuntamiento de Sevilla en su caso, que es el que le compete, lo que puede y debe hacer es intentar atraer turismo.
Nos reseña, que el consistorio en la actualidad “está trabajando por fomentar el turismo nacional. Pero yo soy muy claro, y creo que es darle la vuelta a cosas que son bastante claras. La solución es una vacuna y el medicamento”. Francisco vuelve a reiterarlo, “mientras que no salga esto, nos podremos matar intentando salvar nuestros negocios, nuestro flamenco… pero si a la gente no se le quita el miedo y no viaja por el miedo, poco más podremos hacer”.
Y por otro lado, reseña la incertidumbre que existe siempre ante las decisiones y medidas que se toman desde el Gobierno: “No se sabe cómo va a reaccionar, ni qué medidas va a adoptar, porque un día adopta unas medida y al siguiente las cambia”. Es una indecisión, que daña la imagen de España en el exterior, por lo que generamos desconfianza.
“SI HAY QUE ESPERAR SE ESPERA, PERO CON MEDIDAS VIABLES PARA LA SUPERVIVENCIA DEL SECTOR”
Pero Francisco mira al futuro con esperanza y dice que “cuando empecemos a funcionar, vamos a ir creciendo poco a poco, igual que antes”. Un futuro que aún le queda un tiempo para ser presente, porque tal y como se está planteando esta desescalada a nivel negocios, como puede ser un tablao, es insostenible hasta el momento.
Abrir con un tercio, un 30% o un 50% del aforo, en estos momentos no es rentable, puesto que no se llegaría ni a cubrir gastos y “eso si puede llevar a la quiebra total de un negocio”. Porque se está pensando en una medida lógica sanitaria pero no empresarial ni económicamente viable para el sostenimiento de la misma. “Si hay que esperar se espera, pero con medidas viables para la supervivencia del sector”.
No hay que olvidar que si el turismo es la fuente de ingresos principal de los tablaos actualmente, al estar las fronteras cerradas, ya no solo las nacionales, sino que hasta las propias entre provincias, por mucha limitación de aforo que se dicte, la asistencia va a ser mucho menor por no señalar que inexistente. “El flamenco está muy castigado, es tiempo ahora de recobrar la confianza”. En resumidas palabras, no es hora de pensar si abro mañana o pasado, es tiempo de fortalecer, de ofrecer garantías y seguridad, sólo así se podrá retomar todo.
Un mensaje claro, sin titubeos a lo que Francisco, al final de nuestro encuentro quiso añadir unas palabras de aliento a todos los flamencos y a los lectores de nuestra revista diciéndoles que aunque aún nos queda para retomar nuestra actividad, al final “esto se va a arreglar indiscutiblemente, porque hay medios como para hacerlo, solo hay que saber aplicarlos”. Además añade que “hay que tener paciencia, porque más tarde o más temprano todo volverá, solo necesitamos alcanzar esa tranquilidad que este virus nos ha arrebatado”.