Un proyecto en memoria de grandes figuras del flamenco pertenecientes al pueblo gitano que se exiliaron de barrios históricos sevillanos a los de la periferia, como El Chocolate, Carmen la del Titi, Pepa la Calzona, Bizco Amate o Tragapanes.
Revista La Flamenca 1/4/2022
El Centro Cerámica Triana ha acogido este viernes 1 de abril la rueda de prensa de presentación del proyecto “Zona flamenca” de Factoría Cultural. Se trata de un viaje a las memorias flamencas de artistas gitanos que se exiliaron de barrios históricos de Sevilla a los de la periferia.
Por situarnos en contexto, a lo largo de la historia, uno de los principales centros de interés cultural característico de los barrios sevillanos siempre ha sido el flamenco. Sin embargo, también ha sido una expresión artística que, desafortunadamente, ha tenido que convivir con el incremento del racismo antigitano y los discursos de odio, al tiempo ha aumentado la polarización política y social.
Todo ello, ha provocado que las personas e instituciones vinculadas con la cultura en los barrios, reconsideren la promoción del flamenco, siendo ello, uno de los principales retos principales ante el creciente desconocimiento y pérdida de referentes entre los jóvenes.
Y así surge el proyecto “Zona Flamenca”, como una intervención artística de lucha contra el antigitanismo y la promoción del flamenco, mediante la reivindicación de las artes flamencas como herramienta crítica y antirracista desde la cultura y la educación para la participación, persiguiendo la recuperación de figuras gitanas y obreras que sufrieron el éxodo y el estigma.
Programación
Para arrancar, Factoría Cultura, propone que “Zona Flamenca” lo haga con un ciclo de 5 conciertos gratuitos en distintos barrios obreros de la ciudad durante los meses de abril y mayo.
Las figuras escogidas corresponden a un periodo histórico que comprende desde los años 40 a los 80 del siglo pasado, siendo, por tanto, protagonistas del desplazamiento hacia la periferia de las poblaciones habitantes de los barrios históricos de Sevilla, tales como Triana, San Bernardo, la Macarena o la Alameda.
Así, las actuaciones comenzarán este mismo viernes 1 de abril recordando a Chocolate en la Plaza Río de Janeiro en el Polígono Norte. Antonio Núñez Montoya, nació en Jerez de la Frontera en 1930. Siendo aún muy niño, se trasladó a Sevilla concretamente al barrio del Porvenir y posteriormente a la Alameda de Hércules. Desde muy joven participó en la vida flamenca nocturna de la zona. En los años 70 del siglo XX se hizo con un nombre gracias a los festivales flamencos. Chocolate, como artísticamente se conoce, habitó en los barrios de San Pablo y Macarena. Su flamenco se caracterizó por ser el más estéticamente comprometido, siendo la figura de la que se dispone un mayor número de grabaciones y testimonios. En el 2005 se apagó su voz.
Ahora, este viernes, lo traeremos a la memoria con el concierto que subirá al escenario del Polígono Norte a artistas como Luis El Zambo, Felipa del Moreno, Agujetas Chico e Iván Carpio al cante. La guitarra será cosa de José Gálvez y al compás, Chicharito de Jerez y Manuel Tarote.
El segundo concierto nos llevará hasta la calle Utopía esquina con calle Arquitecto José Galnares el día 7 de abril para recordar a Pepa La Calzona. Josefa Filigrana Moreno, como se llamaba, fue una mujer, gitana, ciega de Triana, todo un ejemplo de resistencia. Ella y su familia son una de esas familias gitanas que fueron desplazadas hacia otros entornos y acabaron en el Polígono Sur. Conocemos mucho de su parte artística gracias a su participación en la serie documental Rito y Geografía del Cante producida por Televisión Española, en los 70, y por formar parte del espectáculo Triana Pura de 1983 en el Teatro Lope de Vega de Sevilla.
Ahora, artistas como Lole Montoya, Ezequiel Montoya, Triana Pura con EL Paty y El Coco, junto a las guitarras de Manuel Vega “El Pati” y Eugenio Iglesias, completando el elenco el piano de Diego Amador, ofrecerán un concierto en su memoria en el Polígono Sur de Sevilla.
Cerrando el mes de abril, el día 22, nos desplazaremos hasta la Plaza de las Constelaciones en el barrio de la Candelaria para recordar a Carmen la del Titi. También del barrio de Triana, Carmen Rodríguez Vargas, nacida en 1928, y que como en el caso de Pepa, es otro ejemplo de familias desplazadas, en este caso hacia la barriada Madre de Dios, uno de los llamados Tres Barrios en el Distrito Cerro-Amate.
También formó parte del espectáculo Triana Pura y sabemos poco más de ellas a través de algunas entrevistas y documentales que se conservan y en los que relata su experiencia en primera persona.
El concierto-homenaje que podremos disfrutar el 22 de abril, es un espectáculo eminentemente femenino, que pone el acento y el foco en la necesidad de más lecturas femeninas del espectáculo flamenco. Para ello, al escenario subirán las bailaoras Carmen Ledesma, África la Faraona y Pastora Galván, acompañadas al cante por Mari Vizárraga, y a la guitarra por Antonio Santiago “Ñoño”.
Ya, en el mes de mayo, la primera de las actuaciones nos llevará a recordar a Bizco Amate. Enrique Guillén Cascajosa, nació en el barrio de Amate en 1917. Es un ejemplo de cantaor bohemio que no se ajustaba fácilmente al mercado del flamenco de sus tiempos, se buscaba la vida cantando en las tabernas y los tranvías. Falleció en 1948 en Sevilla, en la subida del Tamarguillo debajo del puente que era su casa. Sus fandangos son testimonio del compromiso político más radical, costándole más de una noche en el calabozo. Se recorrió Sevilla para buscarse la vida, las tabernas, los cuartitos de la Alameda, el tranvía, el puente del Tamarguillo… No deja de sorprender que alguien con una vida tan inestable y con tantos condicionantes sociales y políticos, consiguiera que su manera particular de cantar los fandangos se convirtiera en la forma de cantar los fandangos en Sevilla. Todo un símbolo de cómo la creatividad desde la marginalidad del propio espacio urbano hispalense, es capaz de crear atisbos de rebeldía artística.
El concierto en su memoria será el 20 de Mayo en la calle Sinceridad con Fraternidad, en Palmete, donde se darán cita Asunción Pérez “Choni” al baile, al cante Manuel Gerena y El Turri, a la guitarra hijo de Manuel Gerena, y completando el cartel un concierto audiovisual gracias a Los Voluble y Alicia Acuña.
Cerrando el este primer ciclo de concierto de “Zona Flamenca”, el 21 de mayo tendrá lugar la cita flamenca en memoria de Tragapanes en la calle Nogal. Se trata de otro trianero, José Rodríguez Lara que nació en este barrio sevillano en 1909. Fue desplazado de Triana hasta Torreblanca. Tragapanes es un caso excepcional de conciencia histórica por su sabiduría y testimonio sobre la historia de su familia, Los Caganchos, y de los gitanos de Triana, algo que conocemos gracias a grabaciones y a su participación en espectáculos, donde además de cantar, tenía la habilidad de narrar historias.
A finales de mayo tendremos la oportunidad de recordarlo con este concierto programado en Torreblanca que será como una auténtica reunión de amigos mayores que conocieron y coincidieron con Tragapanes.
Pero además, el concierto traerá a la memoria a este cantaor trianero, se reivindica el espacio para los artistas mayores, esos que aún están en activo y que tienen tanto que ofrecernos. Hablamos por ejemplo del cante de Romerito de Jerez, Jesús Heredia y Juan José Amador, a quienes le acompañarán el baile de Carrete de Málaga y la guitarra de Antonio Carrión.