Rosario La Tremendita vuelve a Barcelona elevando el músculo del Festival con la versión más rockera del próximo disco doble que prepara junto a diez guitarristas de primera.
Revista La Flamenca. Xavier Grau. 23/10/2021. Fotos: Judit Rodríguez
La voluntad abierta y rompedora de la edición del Ciutat Flamenco 2021 se acredita con la programación de la actuación de Rosario Guerrero “La Tremendita”, en el Centre Artesà Tradicionàrius de Gràcia. La actuación de este miércoles, organizada por Taller de Músics, supuso el regreso de la rompedora cantaora Sevilla a la ciudad de la que guarda buenos amigos y recuerdos.
Tras cinco o seis años sin actuar en la capital, donde grabó a principios de la década -2010- su primer disco, “A tiempo”, La Tremendita regresó para hallar “el mismo público abierto y flamenco, encantador, que siempre me ha acogido en Barcelona”.
Plantó Rosario en el auditorio del Centre Artesà Tradicionàrius a sus dos compañeros de banda: Pablo Martín Jones a la batería y efectos electrónicos a la vez productor del nuevo disco “Tremenda”, y David Sancho a los teclados. Al frente de todo, con su torrente de voz, su bajo rockero y su cajón flamenco, ella, titular y estrella indiscutible de una propuesta doble.
“Tremenda” es una idea de La Tremendita en la que publicará este noviembre un disco con vatios, electricidad y electrónica. Todos palos clásicos como las colombianas de Marchena, las peteneras de la Niña de los Peines y un homenaje en forma de romería a Morente. A la vez, está grabando ahora un segundo disco con esos mismos temas, textos y palos pero acompañada solamente por guitarristas flamencos: Tomatito, Riqueni y Paquete, entre otros.
Esta última actuación en Barcelona aportó proteínas y postureo rockero al Ciutat Flamenco en un derroche de talento y producción global que debería lograr mayor reconocimiento para organizadores.
Dicho esto, la gala de La Tremendita cumplió con su esencia flamenca: apertura con una seguiriya para seguir con temas personales como “Huyo hacia el amo” de su disco “Delirium Tremens” de 2018 de él ofreció también “Al mal tiempo” para cerrar.
Especiales resultaron, la versión de “Dime”, recuerdo y homenaje a Lola Flores. Y la pieza siempre tan personal, “Valeriana”, derivada de la mariana que La Tremendita facturó allá por 2018 también. Se disfrutaron bulerías y soleás y la exhibición de la cantaora con pleno dominio del ritmo y el compás. Bien sea con el bajo o acompañándose con el cajón, la precisión y la energía marca de la casa.
El grueso de la noche, con toda la recarga de efectos electrónicos y de sonido ejecutados por Martín Jones, con la conocida estética transgresora y experimental de Rosario, se lo llevaron los temas del próximo doble álbum y una sorpresa: la presencia de Marta Robles, fundadora de Las Migas, amiga de hace tiempo de la de Triana, con la que se divirtieron por alegrías. Y el público lo aplaudió.
“Disfrutamos mucho con Marta en el escenario porque es la primera vez que actuábamos juntas a pesar que nos conocemos desde hace años”, detalla Rosario al final de la gala.
Al final, satisfacción entre la organización y el público que celebró la exposición y el discurso estético y artístico de la banda de Rosario dejando abierto el interrogante de como será la segunda de este “Tremenda”.
Mientras llega, confirmar que la noche certificó el relato promocional que define el espectáculo actual de la sevillana: “un discurso experimental con raíz tradicional, dos facetas que son imprescindibles para la artista. Sobre el escenario despliega una obra tan dinámica como emotiva, donde la vibración, las texturas sonoras, la estética, el sonido, la voz y las letras proyectan un discurso con el que la autora vuelca su mirada más personal del flamenco.
En palabras de la propia cantaora, “Tremenda” supone “un viaje entre dos mundos y cómo van a convivir en mí esos dos mundos que no existen el uno sin el otro: tanto el de la tradición como el de la libertad de otras texturas y otros espacios sonoros, la electrónica y otras disciplinas”.
Para la crónica, dejar constancia de la calidad de la propuesta y la profesionalidad del trabajo realizado por La Tremendita y sus músicos arropados con mimo por el sonido de Joan Fornés quien, tras casi dos horas de pruebas previas, logró domesticar con acierto el micro de diadema omnidireccional que la cantaora elije para cantar.