Ayer, en el auditorio Marcelino Camacho de Madrid, recibió un entrañable y bien conformado homenaje a sus setenta años.
Web revista La Flamenca. Marta Sánchez Gento. Madrid (Auditorio Marcelino Camacho) 30/10/2015 Fotos: Paco Manzano
Cuando celebra más de medio siglo de dedicación a la música, el maestro de la canción de autor y del cante flamenco, Manuel Gerena, que define lo suyo como “palabras nuevas al son de viejos cantes”, demostró anoche estar en lo cierto, al emocionar al público con una actuación brillante y al recibir decenas de elogios de todos los artistas participantes.
El cantaor sevillano, que fue el último en actuar y estuvo acompañado a la guitarra por Ignacio González -quien lleva ya dieciocho años tocando a su lado-, cantó con la fuerza y la perfección que dan cincuenta años subido a los escenarios. Gerena se estrenó con una revolucionaria canción de su disco Canto a la unidad de verdad, cuyos quejíos emocionaron sobremanera al público. Siguió por tarantos y acabó, sin necesidad de micrófonos -que abandonó a sus espaldas para colocarse al borde del escenario-, con un martinete impecable que hizo que el auditorio se pusiera en pie para despedirle.
El homenaje, que quiso alabar las dos vertientes de Gerena y por ello contó tanto con cantautores como con artistas flamencos, comenzó con una sentida soleá del madrileño Paco del Pozo, acompañado a la guitarra por Paco Vidal. El poeta Félix Grande dice de este flamenco que "canta con la fuerza de su juventud y con la sabiduría de un viejo", y parece que no le falta razón a la vista del buen cante del que dio muestras anoche en el Auditorio Marcelino Camacho. Acabó Paco del Pozo por guajiras y fue muy ovacionado por el público, que durante esta última canción le gritaba: “¡Qué bonito lo haces, Paco!”.
A éste le siguió Luis Pastor, quien comenzó recitando con genial destreza un poema suyo, Qué fue de los cantautores, poema que despertó la admiración del público, que en su siguiente canción, En las fronteras del mundo, le acompañó con palmas.
Fue Luisito -como le llaman por ahí- el encargado de presentar a una de las más grandes flamencas actuales, Carmen Linares, que encabezaba el cartel de los artistas invitados. La cantaora de Jaén no decepcionó a nadie: se arrancó por tientos, que acabaron, con la maestría de Paco Vidal a la guitarra, en unos tangos granadinos que la artista bordó. Carmen Linares, humilde y sincera, se despidió por alegrías y cantiñas y el público, tímidamente, no pudo dejar de cantar con ella, por lo bajo, el conocido estribillo “carita de rosa”.
El siguiente en intervenir fue Pablo Guerrero, cantautor extremeño, que, acompañado a la guitarra por Luis Mendo, interpretó Sueños y Una ciudad en la arena, de sus disco Catorce ríos pequeños. Por su lado, Javier Batanero comenzó con el tema Hablando Solo y, finalmente, el sarcástico cantante despertó las carcajadas del público con su particular adaptación de la canción popular Bella Ciao.
Tras estos, Suburbano, la vallecana banda de rock conformada por Luis Mendo y Bernardo Fuster a mediados de los setenta, interpretó con gran sentimiento Adiós a las Penas de Abril y, posteriormente, puso fin a su intervención con la canción que fue banda sonora de la película de García Berlanga, París Tumbuctu.
Divertida y entrañable, Elisa Serna fue la última artista invitada en intervenir y la encargada de presentar, por tanto, a Manuel Gerena. La cantante demostró que los años no consiguen arrebatarle ni su ilusión, ni el poderío y la perfección de su voz. La cantautora madrileña comenzó con una canción popular, que, aseguró, le enseñaron los mineros españoles en Suiza, acompañada únicamente de la percusión de sus manos contra la caja de una guitarra. Uso después una silla a modo de cuna, aprovechando la percusión de ésta sobre el suelo, para interpretar una nana. Finalmente, con la ayuda de un pandero, deleitó al público con una satírica canción llena de ritmos africanos.
Elisa Serna, a modo de presentación, quiso dar las gracias al cantaor de la Puebla de Cazalla por toda su trayectoria y resumió en tres ítems la contribución de Gerena a la sociedad española de mediados de los setenta: “hizo de puente entre los poetas de la Generación del 27 y los del 70; fue generoso con las asociaciones de la época; y quitó el miedo a la gente”.
Todo el homenaje -letras, cantantes, publicó, presentadores- estuvo impregnado del carácter político que va unido siempre a la figura de Manuel Gerena, quien afirmó durante su actuación que respetaba todas las ideas, “pero ustedes permítanme que yo siga siendo comunista y de izquierdas, ahora más que nunca”. Asimismo, el sevillano recordó que en este homenaje comenzaba a rodarse la película-documental sobre su vida, marcada por su gran activismo social y político. “No queremos dinero, queremos justicia y dignidad”, añadió el cantaor.
Todos los artistas asistentes elogiaron a Manuel Gerena por su compromiso con la igualdad, la justicia y la libertad, así como por conseguir sacar el cante flamenco de la marginalidad en la que estaba sumido a finales de la dictadura y difundirlo así entre las nuevas generaciones.
Ficha artística:
Espectáculo: Homenaje a Manuel Gerena. (Auditorio Marcelino Camacho) Madrid 29/10/2015
Cante: Carmen Linares, Elisa Serna, Luis Pastor, Pablo Guerrero, Suburbano, Javier Batanero, Luis Mendo y Paco del Pozo.
Guitarras: Paco Vidal y Ignacio González.