“Sentimiento y guitarra”, Obra ejemplar.
Revista La Flamenca. José Cenizo Jiménez. 24/11/2023. Fotos: Archivo de José Esteban Cosano
José Esteban Rodríguez Cosano es uno de esos personajes de lo flamenco que merecen la pena. Si alguien se pregunta quién es, si no lo sabe, y por qué es tan merecedor de atención en el mundo de lo jondo, les diré que es un hombre, lo primero, muy cercano y sencillo, muy importante siempre, y lo segundo, que es un maestro jubilado, amante por completo de la cultura andaluza en toda su extensión y, especialmente, por la música flamenca. Por ella, por la gran música culta de Andalucía, la compleja música del flamenco, tan desconocida en realidad, tan sujeta a tópicos y pisotones, a precios, ha hecho mucho este hombre de un pueblo sevillano, Casariche.
Aquí un acercamiento a su labor, relacionada por él mismo:
Trayectoria de José Esteban Rodríguez Cosano
Nací en Casariche (Sevilla) en 1951. Maestro jubilado.
Estudioso del Flamenco, folklore popular y cultura andaluza.
Trabajos publicados:
- Antiguas coplas de Los Corrales (folklore local)
- Entre retamas y olivos (sobre el Flamenco en Los Corrales)
- El Lenguaje en la Cultura Andaluza (texto de apoyo en Secundaria)
- Más de mil refranes sobre el medio rural
- El habla de Los Corrales y sus personajes ocurrentes
- Juan Cebolla - Vivencias de un cantaor corraleño
- Al Lubricán (letras flamencas de mi autoría)
- Tres pregones religiosos en verso
- Semblanza flamenca de José María El Tempranillo (compartiendo autoría con Ricardo Rodríguez Cosano)
Colaborador en revistas locales de Los Corrales, en un periódico comarcal de la Sierra Sur sevillana... Colaborador también en la revista Sevilla Flamenca (años 80).
Iniciador de distintos talleres de cultura andaluza en el Colegio de Los Corrales.
Creador del Taller de poesía andaluza, dando oportunidad a la creatividad del alumnado.
Promotor del Aula de Flamenco en el Colegio de Los Corrales (1.984-85).
Talleres de guitarra y folklore andaluz, con participación total del alumnado.
Cursos para la formación del profesorado, en materia de Flamenco, organizados por el CEP de Osuna.
Durante muchos años toqué por las peñas flamencas. Estuve muy vinculado a la Peña El Sauce.
Colaborador en 3 CDs como guitarrista y en otro como letrista.
Organizador y presentador de eventos flamencos.
Colaborador en multitud de festivales benéficos de aficionados.
Última publicación discográfica: “Sentimiento y guitarra”, de 2023, composición con púa y guitarra, con libreto de José Cenizo Jiménez, acompañado de la guitarra de Antonio Carrión y el piano de Juan Antonio Aguilera “Vitito”.
El 23 de mayo de 2016 fallecía su hermano, Ricardo Rodríguez Cosano, más conocido que José Esteban por la afición por sus publicaciones y sus cargos en las asociaciones flamencas. Nunca lo olvidamos, como tampoco su hermano José Esteban, que le dedica su disco reciente “Sentimiento y guitarra”. En la revista hermana Jondoweb publiqué un breve artículo esos días de luto para su familia y para los flamencos:
Ricardo Rodríguez Cosano colaboró durante los años (2007/2015) en la revista La Flamenca, precisamente, había un artículo dedicado a su figura, del que entresaco estas palabras finales, perfecto resumen de una vida por desgracia ya truncada:
“Emprendedor, humilde, gran amigo, padre ejemplar, hombre sabio, responsable, noble y sobre todo un auténtico amante del flamenco. Estos han sido muchos de los adjetivos de los que este casaricheño de nacimiento se ha hecho merecedor gracias a su estilo de vida. Una personalidad completa que une a Casariche y Lebrija en una profunda tristeza. Hasta siempre Ricardo”.
En el verano de 2023 nos acordamos especialmente de Ricardo porque su hermano José Esteban me solicitó unas palabras para el libreto de su primer disco de guitarra, que toca con púa, algo muy poco visto en el flamenco. Lo hace, por cierto, con calidad y precisión. Es uno de esos casos de admiración y gran apego entre hermanos, de comunes aficiones, y por ello José Esteban le dedica el disco a Ricardo, su hermano del alma. Le pregunté si había escrito algo sobre su hermano. Me entregó una semblanza para una ocasión pública, la LI Caracolá de Lebrija. Publicamos algunos fragmentos en el blog de El Giraldillo.
Concluía ahí José Esteban sobre la ausencia de su hermano: “NUNCA se olvida a una persona que se quiere y se pierde, simplemente se aprende a vivir sin ella… NUNCA se llena el vacío que deja, simplemente se hace un poco menor (…)”.
José Esteban, desde luego, no se queda atrás en entrega al flamenco y calidad humana. La artística tienen ocasión de comprobarla ya desde septiembre en el disco “Sentimiento y guitarra” como compositor solista (con Antonio Carrión como escudero genial y colaboración de Juan A. Aguilera al piano).
DEP Ricardo y larga vida a José Esteban. Dos verdades de la afición jonda, dos cabales que sirven de ejemplo y guía. Del disco “Sentimiento y guitarra” extraigo parte del libreto que con mucho gusto -es un honor- escribí. Lo titulé “De la púa al cielo”:
De la púa al cielo, la púa pulsando con emocionada precisión (o emoción precisa) las seis cuerdas mágicas de la guitarra. Cuerdas bellas pero inertes hasta que unas manos como las de José Esteban Rodríguez Cosano son capaces, con su mano de nieve, como las del poema de Bécquer, tan hondo y jondo, de darles aliento vital. Música de la tierra al cielo, hermoso pentagrama de la belleza y la hondura. Y jondura, pues Rodríguez Cosano nos ofrece con generosidad, por fin, lo que tan bien conoce y comunica: la música culta y honorable del flamenco.
(…) Con acierto, ha seleccionado unos cuantos temas, pocos pero con enjundia, un grupo de toques que son cantes más que reconocidos y reconocibles, cantes tocados /cantados con la púa sobre las cuerdas. Ocho entregas uniendo palos y estilos de cantes muy frecuentados por los artistas, como los fandangos, las malagueñas y verdial o la granaína, junto a otros menos usados, siempre bellísimos a nuestro parecer, como la alboreá, los campanilleros, la nana, la petenera o la saeta.
(…) Cada cante tocado tiene su personalidad. Así, la alboreá, al modo habitual por bulería por soleá, pero con bastante rapidez y alegría, con unos trémolos vertiginosos con la púa, y las letras que recordamos de quien primero las grabó, Rafael Romero “El Gallina”. Los campanilleros tienen un tempo penetrante, una finura exquisita, en la línea de la adornada y melismática de La Niña de la Puebla. Los fandangos están recordando tres estilos: los de Niño León, Pepe Aznalcóllar y Antonio “El Pichichi”. La granaína desborda emoción íntima, como debe suceder tanto al cante como a la guitarra en este palo. En la malagueña interpreta la del Mellizo, construye una perfecta y profunda “mellizada”, con cierre vibrante con la verdial de los Montes de Málaga. La nana se introduce con unos acordes al piano de Juan Antonio Aguilera “El Vitito”, como decíamos, para continuar con las nanas que evocan las de Manuel de Falla, la “Nana de Sevilla” recreada por Lorca, la “Nana del caballo grande” que cantó Camarón y unas nanas, nos dice José Esteban con emoción de abuelo, una en tono normal y otra de tonos agudos, “como si el bebé abriera los ojos y dijera a los abuelos que no estén tristes”. Las peteneras, la chica y la grande, son intensas en sus manos, con el recuerdo de Pastora Pavón entre otros artistas y unen los trémolos introductorios de Carrión con la púa cantaora de Rodríguez Cosano en un repiqueteo espléndido y difícil. Y, por último, la saeta, original, una recreación personal por carcelera pero dentro de los esquemas melódicos del flamenco.
(…) En definitiva, “Sentimiento y guitarra” es una obra ejemplar, novedosa, intensa, muy flamenca, un trabajo que ha costado mucho llevar a cabo y que, gracias a su sensibilidad y técnica superior, con el impagable apoyo y el marco guitarrístico de Antonio Carrión, nos lleva de la púa al cielo. Esperamos con interés el segundo disco. Adelante y gracias.
Hasta aquí lo seleccionado. Lo dicho, admiración por la trayectoria de este gran aficionado y en concreto por este disco especial, distinto, tan logrado. No dejan de disfrutar con él.