Amalia Salomón, Beatriz Benítez, Mar Soriano, Mari Sánchez, María Sanz, Rosa Villa y Xihomara Pinto, son los siete diseñadores que han presentado sus colecciones, que anuncian una primavera inminente con vuelta a la normalidad.
Revista La Flamenca 27/1/2022 Foto: ©CHEMASOLER_ FOTOGRAFO
En la tarde este miércoles 26 de enero, la sede la de Fundación Cajasol en Sevilla acogía la pasarela de los siete diseñadores ganadores de la VI edición del Concurso “Fundación Cajasol Emprende Lunares con SIMOF”.
Un certamen que anualmente lidera la Fundación Cajasol y la Agencia de Moda y Comunicación Doble Erre, con la colaboración de SIMOF y FIBES con el objetivo de impulsar las carreras profesionales de talentos de la moda flamenca con talleres formativos que han consistido en un plan de formación en gestión empresarial, un plan de promoción que supone la participación en este desfile individual y en un desfile en el Salón Internacional de la Moda Flamenca (SIMOF) en 2023.
De este modo, la Fundación Cajasol se ha llenado de volantes, lunares… de luz y vida, anunciado la tan deseada primavera de vuelta a la normalidad, donde esperamos que el traje de flamenca vuelva a tomar las calles de nuestras provincias y que disfrutemos de nuestras fiestas, ferias y romería de forma plena.
En esta ocasión, los desfiles han contado con la presencia de Antonio Pulido, Presidente de la Fundación Cajasol y Raquel Revuelta, Directora de la Agencia de Moda y Comunicación Doble Erre. En total se han presentado siete colecciones pertenecientes a los siete diseñadores seleccionados el Comité de Expertos de Emprende Lunares con SIMOF, quien asegura que todos los ganadores se caracterizan por tener un nivel excelente.
Pasarelas
En este sentido, hemos podido disfrutar de la colección “Aire Puro” de la onubense Amalia Salomón. Se trata de unos trajes inspirados en la naturaleza, el sol, la brisa, las flores… Patrones que hacen que la mujer se sienta libre, poderosa y femenina mediante formas sencillas y poco voluminosas, jugando con mangas y cortes asimétricos. En tejidos ha apostado por los vaporosos con transparencias, metalizados con lentejuelas y flocados haciendo uso de colores como el rosa nude, morados, negros y dorados.
Le seguía sobre la pasarela la sevillana Beatriz Benítez con “Flamenco Art-Déco”, una colección inspirada en este movimiento artístico vitalista y glamuroso que surgió en los años 20 del siglo pasado, a modo de homenaje a este movimiento que devolvió la alegría y la ilusión. Para ello, nos presentó trajes con ángulos, líneas rectas, curvas, simetría y volúmenes, mediante tejidos donde había plumas, plisados… en tonalidades como negros, dorados, azul, rosa y diferentes verdes
La siguiente pasarela la abría otra sevillana, esta vez Mar Soriano con “Reencuentro” inspirada en el monumento a la Plaza España. En sus patrones hemos visto la apuesta por transformaciones de costadillos, destacando sus volúmenes, donde el color predominante ha sido la estampación de azulejos, ocre y
La cuarta colección presentada ha sido la de Mari Sánchez, “Oro líquido”, desde Jaén. Tal y como su nombre indica ha sido un guiño al aceite de oliva de su tierra por eso, los tonos dorados han tomado la pasarela en combinado con unos patrones muy diversos donde hemos podido ver desde un pantalón con top con cola, hasta faldas de nesgas con volantes pequeños, o vestidos con mucho volumen en enaguas. Todo ello usando unas texturas que se movían entre el cres con licra, tull elástico, tull del recio para enaguas y popelín elástico para forro de los vestidos.
La esencia de la provincia de Jaén seguía sobre la pasarela esta vez de la mano de otra paisana, María Sanz, con “Mis Raíces”. Una colección en la que reivindica la vuelta de nuestras costumbres y tradiciones con trajes cómodos y ceñidos a la silueta de la mujer con bastante volúmenes pero ligeros de peso usando para ello tejido viscoelástico y organdí en una escala cromática que se movía entre el blanco, negro y azul claro.
Ya llegando casi al final de la jornada, desde Huelva, Rosa Villa nos presentaba “Esencia”, inspirada en el rosal silvestre más conocido como Galabardera y la evolución de éstos en la historia hasta llegar a los rosales cultivados que conocemos en la actualidad.
Para ello, la diseñadora ha tirado de patrones con formas orgánicas inspiradas en la Galabardera, sus pétalos, hojas y frutos, haciendo uso de tejidos ligeros y vaporosos que ofrecen movimiento como el crespón, mezclados con otros que aportan estructura sin restar movimiento como tul, organdí y tafetán. Y todo ello haciendo uso de una paleta cromática inspirada en la Galabardera al paso por las diferentes estaciones como el amarillo de sus estambres, la gama de rosas de sus pétalos, el verde de sus hojas y el rojo intenso y naranja de su fruto.
El punto y final de esta pasarela de ganadores de Emprende Lunares llegó desde Córdoba de la mano de Xihomara Pinto con “Mi esencia”. Una colección muy personal donde deja claro lo que a ella le gusta y le representa, la época victoriana. La pasarela arrancaba con diseños en tonos claros como beige o blanco que simbolizan sencillez, le seguía el dorado que simboliza una mujer empoderada y segura de ella misma, continuaba con el color rosa empolvado, su favorito, que representa una mujer femenina y dulce, para terminar con el negro símbolo de elegancia. En cuanto a las formas vimos vestidos con mangas, asimétricos, con imitación corsetera y gótico en texturas como el tul bordado, shantung bordado, transparencias, raso y organdí.
Desde la organización de Emprende Lunares se asegura que después de seis años celebrando este programa “estamos muy contentos con el desarrollo que está teniendo. Con cierta perspectiva podemos comprobar que el objetivo dar opción a emprendedores, con una cierta edad, a que se desarrollen como diseñadores profesionales de moda flamenca se está cumpliendo. Ese es el verdadero éxito de Emprende Lunares. Muchos de los que empezaron en este programa, sintiendo que era un sueño, ya lo han hecho realidad”.