Barrio Alto (Sony-BMG, 2006)
Lo nuevo del Potito lleva desde 2004 rulando por "e-mule". Algún gracioso le hizo la puñeta al sevillano mientras la discográfica se decidía a editarlo. Para hablar de Barrio Alto -producido por el propio cantaor y por Diego Amador- podríamos manifestarnos en los mismos términos que para los discos de El Extremeño o Duquende (La Flamenca nº 14); pues comparte con estos la visión conceptual del periodo flamenco-fusión, hoy día más que decadente. Sin embargo, debemos reconocer que Potito sigue esforzándose por introducir palos clásicos en sus discos, arreglándolos desde el minimalismo de la tradición. Otra cosa es que los estilos por seguiriya y soleá estén mejor o peor interpretados, o a la altura de nuestros gustos.
Cumpliendo con los intereses comerciales de toda multinacional, la obra comienza con una copia exacta del "Rosas del Amor" de Tomatito, que el de la Isla grabó para el primer disco del almeriense en solitario. Es inteligente el haber recuperado este tema, pero resultan escandalosos al oído los repetidos "pinchazos" en la toma de voz (casi en los mismos sitios en que los hicieron para Camarón). Una de tanguillos lorquianos, dos raciones por bulerías -con la característica velocidad de Poti-, así como las colaboraciones de Benavent al bajo, las de Diego del Morao a la guitarra y las percusiones de los Suárez, son el complemento ideal a esta obra que hará las delicias de los seguidores de Potito. Que no son pocos.