(K Industria Cultural, 2006)

Después de seis años sin noticias discográficas suyas aparece lo "nuevo" de Juan Cortés "Dunquende"; una obra basada en lo ya realizado con Tomatito e Isidro Muñoz, sus productores más conocidos. Ahora, manda él, y la dirección musical corre a cargo de su guitarrista: Chicuelo. Es el típico disco de flamenco "fresquito" que, ni llega a ser comercial (porque venderá lo justo), ni alcanza el corte del flamenco más tradicional. Si la Iglesia no hubiera quitado el limbo, diríamos que Mi forma de vivir anda por ahí. De los once temas, ocho son festeros. En bulerías y tangos repite hasta el hastío la fórmula pregunta-respuesta con coritos nonainos -tan de moda en los noventa- y, en las alegrías yeyés, mete una trompeta con sordina. Sin embargo, el de Sabadell se atreve en la soleá con sendos estilos de Alcalá (la grande y la chica de Joaquín) y uno de La Andonda, ajustándose sorprendentemente a los cánones. Casi lo mismo sucede en el martinete, templándose por Perico La Tatá, creciéndose en Triana y desinflándose a partir de aquí (todo esto se puede apreciar, discriminando el cante de entre la tribu del Congo que suena por detrás). Cierra con sus fandangazos habituales. Para los interesados, entre los colaboradores están Niño Josele, Piraña, Benavent, Raynald Colom y Roger Blavia.