Empieza una nueva semana en el ciclo flamenco jerezano que además del gran regalo de Carrasco durante la entrega de premios, nos ha permitido disfrutar de Irene Rueda, Juan Tomás de la Molía y María Moreno entre otros.
Revista La Flamenca. Jaime Trancoso 22/2/2022 Foto portada: Javier Fergo/Festival de Jerez
El lunes tras el primer fin de semana del Festival de Jerez fue de lo más ajetreado, con una convocatoria de rueda de prensa a las 11.30 h. en la Bodega San Ginés para anunciar los espectáculos del martes y miércoles, que serán los asignados respectivamente a Juan Fernández, Ana Morales, Salvador Gutiérrez y Manuela Carpio.
Sin descanso, asistimos a la Gala de Entrega de los Premios a los artistas más destacado del Festival de Jerez 2021 en la Bodega de González Byass.
De dicha gala de premios nos gustaría destacar la magnífica actuación de Reyes Carrasco. La proyección de esta joven de 16 años es increíble, destacando su seguridad, sus registros graves y la facilidad y capacidad para dejar al público estupefacto, dejando al respetable de piedra. Lo más notorio fue cómo cantó la seguiriya, poniendo a todo el público en pie a mitad del recital. No queda ahí su mérito, que también reside en ir ampliando y variando progresivamente su repertorio. Estuvo acompañada magistralmente por Manuel Valencia, además de su inseparable madre -que la está llevando impecablemente de la mano- y las palmas de Manuel Bellido y Roberto Jaén.
Por la tarde, bajo el epígrafe de Sabia Nueva y Universal, disfrutamos con los Ganadores del Concurso Turín de la Frontera. La primera parte correspondió a la granadina Irene Rueda, acompañada por su paisano Antonio Campos con “Tronie. Retratos del Alma”, una pieza reflexiva, introspectiva, que ahonda en la búsqueda de gesticulaciones, expresiones faciales y movimientos corporales. Nos regaló magníficas estampas con mucha alma y momentos de sutilezas, especialmente gracias a su personal estilo y dominio del mantón. También en esta edición estamos apreciando cómo cada vez se les exige más a los percusionistas, en el caso de Rafael Heredia ejecutando una grabación de campanas desde un ordenador.
También con mucha seguridad comenzó Juan Tomás de la Molía, que salió al escenario solo pero que se rodeó de tres cantaores entre los que destacó “El Pechuguita”. Juan se arrojó incluso a arrancarse a cantar, con mucho desparpajo y gracejo gaditano. En esta segunda parte la iluminación de Conchi Acal estuvo muy acertada. Precisamente ambos ganadores tienen en común su paso por la Fundación Cristina Heeren.
Por último, no solo segura sino controlando todo milimétricamente, el espectáculo “More (no) more” de María Moreno está muy conseguido y es que el público jerezano tenía ganas de disfrutarla con un espectáculo propio, no como cuando la vimos en 2020 en Jerez en un show flamenco “Gala Cádiz-Jerez” de números independientes. Podrá gustar su parte central donde tiene cabida la guasa gaditana o no, pero el final del espectáculo con la soleá y cómo le va imponiendo los silencios a su baile, cómo se cuestiona entre la tradición y lo contemporáneo, bailando con y sin zapatos, sentada en el cajón convirtiendo este instrumento en una extensión de su percusión corporal, con bata e incluso con castañuelas… en definitiva, ¡un espectáculo muy completo y conseguido! Es más, “More (no) more” de María Moreno es un espectáculo candidato a llevarse el Premio del Público en esta edición del Festival de Jerez 2022.
A esa candidatura ayuda notablemente el diseño de iluminación magistral de Antonio Valiente. Un espectáculo con cues infinitas que juega con todos los aparatos y elementos lumínicos que tiene a su favor: calles separadas por alturas, ciclorama con sus panoramas, gasa, así como diagonales, bajando varas de luces con pares para crear efectos, etc. El espectáculo está muy medido y girará por ejemplo por Luxemburgo. Si no lo han visto todavía, ¡no se lo pierdan!