En el pasado Festival de Flamenco de Mont de Marsan tuvimos la oportunidad de saludar al nuevo director de la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco. Amablemente, nos concedió esta entrevista para conocer un poco más a este malagueño de nacimiento y flamenco de adopción
Su nombre se barajaba en las quinielas para ocupar el puesto de director de la Agencia tras la marcha de Bibiana Aído, pero ¿se lo esperaba usted?
No tuve conocimiento de nada hasta que, de manera sorprendente e inesperada recibo la llamada de la Consejera, en la que me comunica el ofrecimiento. Ni en mis más remotas cabilaciones podía sospechar que iba a tener la más mínima oportunidad de disfrutar el privilegio de esta responsabilidad mía de hoy.
Es el primer director de la AADF que se ha dedicado a la investigación y la docencia del flamenco en el área universitaria, ¿en que puede beneficiarle en su nueva responsabilidad?
La Universidad aporta un punto de mesura, un espacio para la reflexión que es independiente y que se aleja del estrés en que estamos inmersos. La universidad es una atalaya para la investigación, toda una batería de posibilidades y capacidades muy interesantes y convenientes cuando se asumen nuevas responsabilidades y nuevos proyectos.
¿Y en qué cree que le puede perjudicar? ¿Ha tenido que dejar algún interés personal que estuviera estudiando?
No me perjudica para nada, todo lo contrario. He tenido que dejar a un lado dos proyectos en los que estaba trabajando para dedicarme exclusivamente a este puesto. Cuando este ciclo pase, los retomaré si me es posible. En este momento tengo la obligación de dedicarme al cien por cien a la dirección de la Agencia.
¿Qué se ha encontrado cuando ha ocupado su nuevo cargo? ¿Se imaginaba como era el funcionamiento de la Agencia?
La Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco cuenta con unos excelentes recursos humanos con una dilatada experiencia en la gestión cultural de algo tan nuestro como es el flamenco.
¿Qué significa para usted el discutido art. 68 del estatuto de autonomía? ¿Hay que legislar el flamenco?
No lo discuto para nada, el flamenco está presente con personalidad propia en el nuevo Estatuto, conquista que debemos aplaudir, nunca discutir, porque es la garantía jurídica de un reconocimiento al máximo nivel con independencia de resultados electorales. A partir de ahora será el momento de vislumbrar las potencialidades del desarrollo legislativo del texto estatutario en relación con el flamenco.
Se critica desde varios sectores que la agencia sea una promotora de espectáculos, ¿es ese uno de los cometidos de la misma?
La agencia impulsa y apoya un abanico extenso e intenso de actividades flamencas. Es reduccionista y desaconsejable limitar el ámbito de actuación de la Agencia al cuadrilátero del escenario. En tal caso, la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco no nace para competir ni rivalizar sino para incentivar y estar del lado de los flamencos que hacen cosas por el bien del flamenco.
Digitalización del fondo del Centro Andaluz de Flamenco de Jerez y el acercamiento del flamenco a las aulas de primaria y secundaria han sido uno de los bastiones de su predecesora, ¿cómo contribuyen ambas líneas en el desarrollo del flamenco?
El flamenco tiene que dar el salto del salón de actos al aula, y estar presente de forma regular en el sistema público de educación andaluz. Debe constituir este reto una ambición legítima para el flamenco. Los niños y niñas andaluces deben conocer a temprana edad cuál es una de las manifestaciones culturales más distintivas y relevantes del patrimonio andaluz. Al mismo tiempo, seguiremos con la intensa plataforma de digitalización de fondos y de adquisición de nuevos archivos y legajos para que el Centro Andaluz de Flamenco siga siendo el emporio documental del flamenco en el mundo.
Hablando del CAF, con el revueloque se montó tras el cambio producido en el seno de la Consejería de Cultura ¿cómo ha quedado definido dicho organismo dentro de la Agencia?
El Centro Andaluz de Flamenco ha pasado de tener una relación tangencial con la Agencia Andaluza para el Desarrollo del Flamenco como órgano que aglutina las políticas en esta materia, a estar insertado plena e íntegramente en su estructura orgánica. Así podemos aprovechar al máximo todas sus potencialidades.
Ha sido jefe de prensa de varias instituciones importantes, ¿le puede ayudar en su actual trabajo?
Todas las vivencias personales y todas las experiencias profesionales constituyen en el itinerario vital de cualquier persona un bagaje irrenunciable que nos configura y que nos ayuda a la hora de asumir responsabilidades, adoptar decisiones y acometer nuevos proyectos. La comunicación forma parte de nuestras vidas. La eficacia en el uso de estrategias comunicativas es fundamental para que la ciudadanía sepa qué hacen todos los responsables públicos con un presupuesto que es de todos. En eso, mi profesión me puede ayudar.
Igualmente imparte la docencia en el doctorado sobre flamenco en la Universidad de Sevilla, ¿cree que algún día existirán asignaturas obligatorias o troncales en el curriculum universitario de humanidades sobre la historia del flamenco?
Estamos en un momento procesal importante, no es baladí. Estamos ante una redefinición del sistema universitario en el que aparece un nuevo mapa de cursos de doctorado y postgrados, y tenemos la obligación de defender la presencia estable del flamenco como un área de conocimiento diferenciada.
Entrando en el terreno personal ¿de donde le viene su afición al flamenco?
Me viene de la adolescencia, cuando tuve la ocasión por primera vez de acercarme a los discos y a los aficionados de mi pueblo cuando empecé a colaborar con la emisora municipal. Entonces tomé contacto con un mundo ajeno a mí que me envolvió por completo hasta el día de hoy.
Ha investigado sobre el flamenco en Granada, y trabajado en Cádiz, ¿existen diferencias en la manera de entender el arte jondo en los diversos puntos de Andalucía?
El flamenco es diverso y complejo en sí mismo, tiene una riqueza artística avasalladora, por lo que me parece aberrante observarlo únicamente desde un punto de vista determinado.
¿Cree que es por ello que es necesario que programas como "Flamenco Viene del Sur" se extiendan por todas las capitales de provincia de Andalucía?
Flamenco Viene del Sur debe llegar a todo el Sur. En estos momentos estamos trabajando para que, si es posible, así sea.
¿Por qué motivos le gustaría que le recordasen en un futuro tras su labor al frente de la Agencia?
No aspiro a ser recordado porque me parece pretencioso y no quiero pecar de imprudente. Tengo claro que no voy a hacer nada que no esté en mi mano ni a prometer nada que no pueda cumplir.
Hoy en día el flamenco es una industria cultural más ¿Hay previstos estudios de índole socioeconómica al respecto? ¿Se puede cifrar verdaderamente el volumen de este negocio y a las personas que se les da empleo?
El flamenco es nuestra identidad cultural más característica. Sabemos qué es el flamenco pero no tenemos datos fiables, científicos y seguros sobre cuál es su impacto socioeconómico. Necesitamos respuestas a estas preguntas. Es una línea de trabajo que voy a emprender en los próximos meses.
Se busca la profesionalidad del flamenco, y cada vez son más los requisitos que exige la administración a la hora de conceder ayudas y subvenciones, pero ¿cómo se puede combatir la lacra de años anteriores? ¿se van a tomar algunas medias a favor de artistas que han trabajado toda la vida y ahora ni siquiera tienen una pensión asistencial?
Desde la era de los cafés cantantes se viene hablando con insistencia de la profesionalización del flamenco. Ha sido ésta una profesión exigua en muchos casos, particular y supeditada a relaciones contractuales irregulares. Hemos mejorado bastante aunque aún queda mucho por hacer.
¿Estima necesario una reforma del sistema fiscal y de la seguridad social de los artistas flamencos?
Ese es un tema para el que esta Agencia no tiene competencia alguna, pero los profesionales del flamenco tienen que tener reconocidos todos los derechos laborales y salariales cuando se suben al escenario. Ése es un mínimo común denominador irrenunciable.
Cada vez se publican más libros sobre flamenco, ante lo cual muchos dicen que los flamencos no leen. igualmente los artistas critican que alguien que no sabe hacer compás, cantar, bailar o tocar la guitarra no puede escribir sobre el arte jondo, ¿cual es su opinión al respecto?
El flamenco va más allá de la música. Las últimas décadas han sido objeto de estudio científico y racionalizado. Es ésta una particularidad que hoy comparte con el resto de las artes y a la que no puede renunciar el flamenco. Creación artística e investigación científica no son incompatibles.
Recientemente le hemos visto en el festival de Mont de Marsan en Francia, ¿se concibe el fenómeno flamenco de distinta manera fuera y dentro de España? ¿cuales son los planes de la Agencia respecto al extranjero?
La promoción exterior del flamenco es una linea estratégica para la Agencia. Es nuestro embajador cultural en el mundo, somos conscientes de ello, por lo que se ha creado un área específica dentro de la Agencia. Es indudable la poderosa capacidad de atracción que tiene el flamenco fuera de nuestras fronteras.
Por último, agradecerle su amabilidad por atendernos, pero antes de despedirle nos gustaría saber si podremos verle algún día en un fin de fiesta dándose un pataita, o si el protocolo no lo contempla.
Quien no lo contempla soy yo. El fin de fiestas tiene que acabar en lo alto, debe constituir una culminación del espectáculo in crescendo. No he sido tocado con la barita mágica del arte, por eso me considero un aficionado del patio de butacas.
Fotos: Paco Sánchez