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La Dulzura del Melisma
Debut discográfico de este joven onubense que va dejando buen sabor de boca por los festivales donde actúa, fruto de esta nueva escuela de cantaores donde predomina nuevamente el melisma. Su voz laína nos conduce por diez temas que abarcan desde la canción aflamencada hasta los estilos más sobrios como la toná y la debla.
Guillermo Cano, premiado varias veces en el prestigioso Festival Internacional del Cante de las Minas, así como en otros numerosos concursos, acaba de presentar su primer disco, "Rincón del pensamiento".(Pasarela, 2007) que ha sido producido por Montoya Musical. Una muestra de lo que podemos encontrar en sus directos en los que Guillermo brilla de forma excepcional y destapa aquellas características que realmente le definen. Para lo temas del disco ha contado con compositores como Jesús Bienvenido, Paco Cruzado o Sebastián Márquez. Guillermo también ha realizado tareas de composición y de adaptaciones clásicas entre las que destacan la malagueña de Chacón y el tema "A paso lento". Corte ineludible del disco que aúna la Toná de Trilla, Debla de Triana, Tona de la Puebla y Cabal del ciego La Peña. Pero debemos significar la gran labor realizada por Ricardo Rivera como productor artístico y guitarrista, que ha sabido contar con las percusiones de Paquito González y El Cepillo, y los coros de otro gran valor, David Palomar. Como ocurre con toda manifestación artística, el flamenco ha evolucionado y cambiado mucho en las últimas décadas. Ha probado el acercamiento a otros géneros musicales, el acompañamiento de instrumentos ajenos y sobre todo, ha explotado los palos más accesibles a los neófitos con el objetivo de alcanzar el llamado "gran público". Pero todos los ciclos tarde o temprano suelen buscar el origen y Guillermo Cano ostenta la mirada hacia atrás. Su voz aguda, larga y respetuosa procede de una etapa básica. Prácticamente todos los pilares decisivos quedaron establecidos en la Edad de Oro del flamenco. Son los años en que quedan dibujados los ejes rectores para el futuro. En apenas unos años nacieron y crecieron junto el flamenco los grandes colosos, los genios. He aquí la peculiaridad de Guillermo Cano, un cantaor joven que sabe a tradición, pero dotándole de elementos de corte moderno.